Magna desorganización

Siempre he pensado lo mismo y he sido fiel a mi opinión desde que se anunciara la Magna hace unos tres meses. Una Magna requiere preparación y esta vez no ha sido la falta de tiempo la que lo ha impedido. El Consejo de Hermandades ha tenido tiempo de sobra para preparar el Acto de Fe y, sin embargo, sólo hizo un Plan A, cuando debería haber existido un Plan Z. Pésima actuación del Consejo y más pésima aún la imagen que la Andalucía Cofrade ha tenido de la Semana Santa de Huelva. No soy quién para buscar culpables, pero las perjudicadas están claras (y mojadas...). El sevillano, cordobés, malagueño o de donde fuese no iba a criticar jamás el Patrimonio de las Hermandades, que era el miedo que teníais los catetos de Huelva, creyendo que la gente de fuera son tan criticona como nosotros. Lo que sabía que iban a criticar era la organización, ya que era la crónica de una muerte anunciada. No sé por qué, pero sabía de sobra que a la mínima nube que hubiese en el cielo, la íbamos a liar. Y la liamos. Y se rieron de nosotros. Espero que esto nos sirva de escarmiento y que las Hermandades que salieron o intentaron salir y que la lluvia les salvó del ridículo maduren y a partir de ahora no vayan de valientes por la vida, porque era totalmente innecesario arriesgarse ayer. Algunas Hermandades, como el Resucitado, necesitaban llegar al centro y es más, en este caso se vio obligada. Sufrieron en la ida, se ganaron a Huelva en la vuelta. Incoherencia en Pérez Cubillas (y no es nada nuevo), insistencia en la Orden (si no se puede salir, no se sale) e inhercia en el resto de los barrios. Estoy triste, porque predije que iba a pasar lo peor y ha pasado, pero feliz porque la próxima Magna estará (espero) mejor organizada, con mayor participación de las Hermandades y (como ya he dicho) menos importante, mejor Patrimonio. Escarmiento y madurez, sólo espero eso.